Iraida Noriega; una voz de cuerpo entero

Presenta El jazz bajo la manga Luis Barria Mientras la espero, echo un vistazo al escenario de Realia donde se presentó el sábado pasado; recuerdo esa música enigmática, su imagen tras el teclado, su voz naciendo unida a la voz del pasado inmediato que reproduce el looper, los momentos rockeros de la guitarra de Juanjo López, la pecursión de Luis Miguel Costero que viaja por los ritmos del mundo, los visita, los celebra y luego parte en busca de otros nuevos, la voz de Iraida que juega, salta, sube al trampolín y desde él se avienta para caer en mares de hipnotismo que rompe después, a veces con palabras, a veces ya sin ellas, y yo participo de la seductora novedad aunque extraño su presencia escénica, se lo diré en algún momento. Recuerdo también el ancore, cuando volvió a ser voz de cuerpo entero y bajó del escenario para caminar entre las butacas, esa voz como de chicle que cambia de forma a cada instante, que hace bombas que al reventarse se adhieren a la nariz...