Irma no murió de un infarto: la violencia y la impunidad la mataron

El 18 de julio de 2025, Irma Hernández Cruz maestra jubilada y taxista en Álamo Temapache, Veracruz fue secuestrada por negarse a pagar extorsión a un grupo criminal. Durante días, su familia y colegas taxistas exigieron su regreso con vida. Seis días después, su cuerpo fue hallado en un paraje rural entre Álamo y Cerro Azul. La autopsia reveló lesiones internas en el corazón y determinó “infarto” como causa de muerte. Sin embargo, este diagnóstico ha generado indignación social: sin secuestro, sin amenazas, sin la violencia ejercida contra ella, ese infarto nunca habría ocurrido . La muerte de Irma es consecuencia directa del crimen organizado y de la impunidad que lo permite. Un mensaje impuesto por el terror Antes de ser asesinada, Irma fue obligada a grabar un video en el que, visiblemente atemorizada, advertía a otros taxistas que pagaran la cuota exigida por el grupo delictivo. “Con la Mafia Veracruzana no se juega o terminarán como yo”, dec...